18 agosto, 2010

Roma (2ª Parte)

Sábado, 27 de marzo ‘10

Buon Giorno! Hoy nos proponemos visitar la Roma más “moderna”.

Primera parada Fontana del Tritone, sino recuerdo mal solo uno de los delfines que sujeta la estatua es original, los otros tres son replicas, esta fuente fue construida por Bernini (competidor directo de Borromini, aunque este no fuese tan famoso).

Seguido esto vamos a la Piazza del Popolo, donde se mezclan varias influencias arquitectónicas como el barroco, neoclásico y como muchas otras cosas en Roma un obelisco Egipcio aposentado en el medio de la plaza. A un lado de la plaza se encuentran dos iglesias que se construyeron para hacer una entrada más majestuosa a los viajeros de antaño que accedían a Roma por la entrada norte. Estas iglesias que parecen iguales guardan sutiles diferencias (que desde fuera no se pueden apreciar) y es que las bóvedas son distintas, pero nos quedamos sin poder entrar ya que ambas iglesias se hayan cerradas, así que nos dirigimos a nuestro siguiente destino, el mausoleo Augusto.
Al llegar al mausoleo una gran desilusión es imposible acceder ya que hay obras en todo el perímetro del mausoleo y no hay manera de poder acceder (mas tarde me daría cuenta que está cerrado al público). Así que nos dirigimos dirección a la Piazza Colonna pero nos topamos con la Corte di Cassazione (Tribunal de justicia) que nos sorprende por la cantidad de detalles con la que esta decorada su fachada.
Visitamos ahora la Piazza di Montecitorio y la Piazza Colonna, esta ultima tiene una columna increíble, con una decoración asombrosa y con una cantidad de detalles que me quedo fascinado, como en una columna de tal magnitud hubieran podido realizar unos grabados con tal cantidad de detalle.
Mala noticia se nos pone a llover así que no hay mejor momento para ir a tomar un latte machiacto, que vendría a ser un café con leche extremadamente corto de café servido en un vaso alto (no de tubo). Esta realmente bueno el café, hacemos tiempo y vemos un poco más la guía a ver donde podemos dirigirnos y documentarnos un poco acerca de lo que hemos visto y veremos.
A la que cesa la lluvia nos dirigimos a otras de las grandes de Roma, el Templo di Adriano, el Pantheon y la Piazza Navona.

Del templo solo quedan las columnas, eso sí majestuosas como casi todo lo que hacía los romanos, aunque el deterioro de estas se nota más que de otros monumentos de la ciudad.
 Ya con las ganas de ir a ver el Pantheon nos dirigimos hacia él y cuál es mi desilusión cuando veo que la mitad derecha de la fachada se haya con andamios pequeño chasco que me llevo. Siempre me sucede lo mismo, siempre que me dirijo a ver monumentos, catedrales, puentes, etc., en cualquier ciudad siempre tiene que haber algo en obras, es mi cruz. Por suerte el interior se halla en perfecto estado. Es majestuoso por dentro.
El orificio situado arriba es un agujero literalmente, por lo tanto deja pasar el sol que se refleja en las paredes del interior, pero en consecuencia también entra la lluvia por él y por ello en el suelo hay unos orificios para evacuar el agua que entre dentro.

Durante el solsticio de verano el sol incide directamente en la puerta de entrada, era por ello que el emperador entraba por la puerta ese día, habiendo reunido a todo el pueblo dentro, para que al entrar pareciera un dios iluminado.

Tras la magnífica visión del Pantheon nos dirigimos hacia la Piazza Navona, el centro de Roma.

La Piazza Navona tiene forma de estadio, ya que antiguamente era uno y todavía a día de hoy conserva la forma, circular en uno de sus extremos y recto en el opuesto. Se pueden encontrar cantidad de pintores que están vendiendo sus cuadros al carboncillo, al óleo o al agua.

Su fuente, seca y en obras es el centro de dicha plaza, justo entre las fuentes de Bernini y Borromini.

Una vez que ya hemos comido y habiendo reposado un rato nos dirigimos a la Piazza Campo dei Fiori donde todos los días hay un magnifico mercado donde venden flores, pasta, y fruta y verdura fresca, carne y todo tipo de quesos, es volver atrás en el tiempo y ver un autentico mercado con todo su bullicio enclaustrado en una pequeña plaza presidida por la estatua de un monje que todo lo vigila.
Visitamos el mercado y nos dirigimos hacia una terraza para tomarnos un Capucchino y nos vamos a la zona donde se encuentra el Area Sacra y a posterior irnos al Monumento a Vitroiro Emanuele II, en cuyo interior se puede observar un pequeño museo de mediados del S. XIX y que además nos ofrece unas bonitas vistas de Roma.
Ya entrada la noche y habiendo cenado (Pasta Alla ‘Amatriciana, ya solo queda probar el Risotto) nos vamos a comer un gelatto al lado de la fontana di Trevi, que adquiere otro encanto bajo la luz de las estrellas y de la luna.




Domingo, 28 de marzo ‘10

Al llegar allí vemos que hay muchísima gente y nos damos cuenta que el papa esta oficiando una misa, nos quedamos un rato escuchando, que no entendiendo, y nos vamos. Ya podemos decir que hemos estado en una misa del Papa.
Decidimos ir a ver la basílica de San Pietro y el museo, pero hay casi 3 horas de cola y nos planteamos otra opción, así que nos dirigimos a ver el Castel Sant’ Angelo.
Este castillo además de castillo ha sido también fortaleza, mausoleo, prisión, refugio de papas e incluso palacio.
Dice la leyenda que una vez la peste asoló Roma y la gente fue a resguardarse de la enfermedad en el castillo, una vez hubo pasado la peste se dice que el Arcángel Gabriel bajo del cielo y posándose en una de las torres envainó la espada en señal de que la peste había terminado y que el pueblo podía volver a la vida normal.
Visitamos todo el castillo por dentro y vemos alguna que otra reliquia y lo laberíntico que es todo, así que después de andar un buen rato y viendo que la misa que se estaba oficiando ya ha terminado nos acercamos a la Piazza San Pietro y poder disfrutar un poco mejor del Vaticano sin tanto bullicio.
Sabemos que la misa ha terminado puesto que desde el castillo hay visión directa al vaticano, se dice que existe un pasadizo secreto que podía llevar a los papas directamente del vaticano hacia el Castillo en caso de emergencia sin que fueran vistos.
Nos da la hora de comer y yo hoy me había planteado comerme un típico pannini y así ha sido, ya con el estomago lleno y tras pasar por una hamburguesería para coger una hamburguesa y unas patatitas con su refresco nos vamos a la Piazza Della Republica muy cerca de donde tenemos el hotel, descansamos un rato en la fuente y vemos que hay una pequeña basílica la de Santa Maria de li Augeli, donde por fuera parece destruida y como ya he comentado pequeña y al entrar engaña, es mucho mas grande y su estado de conservación es perfecta y esta muy bien cuidada.
Ya es tarde así que nos volvemos al hotel para ducharnos y salir a cenar y hasta mañana que será otro día.

No hay comentarios: