19 agosto, 2010

Roma (3ª y ultima parte)

Lunes, 29 de marzo ‘10


Hoy nos proponemos ir a comprar al mercado de las flores que se haya justo detrás de la Piazza Navona, creemos que las cosas nos saldrán a un mejor precio y nos quedara mejor sabor de boca el hecho de haber ido a comprar a un sitio donde los propios romanos compran algunas de sus delicatessen.
Todo tiene tanto color, todo se ve tan fresco y hay tanta variedad que entran ganas de comprarlo todo, pero aun así los precios están algo subidos aunque quizás no tanto como en las típicas tiendas de Souvenirs, así que nos hacemos con unos paquetes de pasta, con un poco de auténtico Parmesano Reggiano, alguna “joya” de cristal de Murano y poca cosa más, un rato paseando entre sus puesto y dejándonos seducir por un mercado autentico y no tan lleno de turistas.
Una vez realizadas las compras pertinentes y de callejear un poco por Roma nos topamos con la Isla Tiberina, situada en medio del río Tíber, esta isla peculiar en forma de barca albergaba antaño un templo dedicado al díos griego de la medicina, cruzamos el puente y vemos que en el interior no hay mas que un par de bares y una pequeña iglesia, así que nos salimos sin mas dilación y nos dirigimos hacia la Piazza del Campidoglio.
En la Piazza del Campidoglio se haya una estatua de Marco Aurelio construida por Miguel Ángel y fundida en bronce, Miguel Ángel además también fue el diseñador de dicha plaza quien lo encargo el Papa Pablo III. También en dicha plaza se haya el museo del Capitolio.
La entrada a esta plaza esta guardada por dos leones traídos de Egipto, desde aquí se puede observar la larga escalinata también resguardada por dos grandes estatuas con sus respectivos corceles.
A escasos metros de la plaza dirigiéndose hacía la parte trasera del Foro se haya una pequeña estatua de Rómulo y Remo.
“Cuenta la historia que Rómulo y Remo fueron los fundadores de Roma, estos dos pequeños fueron amamantados por una loba cuando su madre tuvo que abandonarlos para que no fueran asesinados. Crecieron a manos de unos campesinos cuando fueron mayores y descubrieron su historia fueron allí donde embarranco la cesta y fundaron roma pero al no llegar a un acuerdo de quien seria rey Remo fue asesinado por Rómulo, que mas tarde en arrepentimiento le dio el nombre a la ciudad en recuerdo de su hermano.”
Un día menos y ya nos queda poco para irnos…

 
 
Martes, 30 de marzo ‘10


Hoy nos levantamos con la idea de ir a ver el museo del Vaticano y rezar para que no hubiera tanta cola como el pasado domingo.

Hacemos poco más de hora y media de cola y por fin entramos al famoso Vaticano, antes de adentrarnos dirección a la Capilla Sixtina como borregos o lemmings, decidimos ir a dar una pequeña vuelta por las galerías que se encuentran dentro del museo, la galería de arte, la de los retablos, la de los papamóvil, los tapices en la cual podemos ver el famoso tapiz de la ultima cena de Miguel Ángel que tanta polémica ha traído a raíz del libro El código Da Vinci.
Ya por fin nos adentramos en dirección a la Capilla Sixtina, pasando por muchos pasillos todos demasiado decorados para mi gusto y demasiado recargados pero como todo hay modas y la moda de aquella época era sobrecargar todo. Seguimos a toda la marabunta y por fin después de recorrer medio Vaticano guiados por cientos de personas llegamos a la famosa Capilla Sixtina.
Es una habitación increíblemente alta y como todo en el Vaticano demasiado decorado. Se dice que a Miguel Ángel le encargaron decorar el techo de la capilla con un motivo de la biblia pero después de pasarse 3 años subido al andamio meditando sobre que motivo pintar en el techo se decidió por decorarla con la historia de la humanidad según la biblia, así que cada recuadro que se muestra en el techo de la capilla es una historia de la biblia, por así decirlo la biblia en cómic y cada viñeta un capitulo. Acabamos de cruzar lo que nos queda del Vaticano para dirigirnos a la capilla de San Pedro.
Me parece abusivo que la iglesia ande pidiendo dinero y luego se lo gaste en las obras que tienen en el Vaticano de un valor incalculable, también me parece denigrante que tras tantos, tantos años de hacer sufrir al pueblo la iglesia aun conserve el reconocimiento que tiene y que todavía hayan personas que crean en ello, pero cada uno es libre de tener las creencias que decidan, lo que si que no le quita ningún mérito, dejando al lado pensamientos religiosos, la calidad arquitectónica que tienen todas sus obras y la majestuosidad y grandeza con las que están realizadas es imposible que dejen a nadie impasible.
Tras conocer un poco mas sobre esta pequeña ciudad nos vamos a comer por aquí cerca. Una vez hemos repuesto fuerzas y hemos descansado un rato nos adentramos en el metro que nos lleva hasta el circo romano, que no es nada mas que una superficie de hierba en donde antes se corrían en cuadrigas y ya que esta cerca nos vamos a ver la famosa Bocca Della Verità, en donde dice la leyenda que si pones la mano dentro de la boca y mientes esta se cierra y te “come” la mano.
Ya no tenemos mucho más tiempo y no tenemos muchas mas fuerzas así que cogemos un autobús y nos vamos al hotel donde esta noche descansaremos como reyes.


Ya ultimo día en Roma, mañana toca hacer las maletas, y volvernos a casa. Tal como se hace la promesa en la fontana de Trevi, hay que volver a Roma alguna vez.

¡¡Ciao Roma!!

18 agosto, 2010

Roma (2ª Parte)

Sábado, 27 de marzo ‘10

Buon Giorno! Hoy nos proponemos visitar la Roma más “moderna”.

Primera parada Fontana del Tritone, sino recuerdo mal solo uno de los delfines que sujeta la estatua es original, los otros tres son replicas, esta fuente fue construida por Bernini (competidor directo de Borromini, aunque este no fuese tan famoso).

Seguido esto vamos a la Piazza del Popolo, donde se mezclan varias influencias arquitectónicas como el barroco, neoclásico y como muchas otras cosas en Roma un obelisco Egipcio aposentado en el medio de la plaza. A un lado de la plaza se encuentran dos iglesias que se construyeron para hacer una entrada más majestuosa a los viajeros de antaño que accedían a Roma por la entrada norte. Estas iglesias que parecen iguales guardan sutiles diferencias (que desde fuera no se pueden apreciar) y es que las bóvedas son distintas, pero nos quedamos sin poder entrar ya que ambas iglesias se hayan cerradas, así que nos dirigimos a nuestro siguiente destino, el mausoleo Augusto.
Al llegar al mausoleo una gran desilusión es imposible acceder ya que hay obras en todo el perímetro del mausoleo y no hay manera de poder acceder (mas tarde me daría cuenta que está cerrado al público). Así que nos dirigimos dirección a la Piazza Colonna pero nos topamos con la Corte di Cassazione (Tribunal de justicia) que nos sorprende por la cantidad de detalles con la que esta decorada su fachada.
Visitamos ahora la Piazza di Montecitorio y la Piazza Colonna, esta ultima tiene una columna increíble, con una decoración asombrosa y con una cantidad de detalles que me quedo fascinado, como en una columna de tal magnitud hubieran podido realizar unos grabados con tal cantidad de detalle.
Mala noticia se nos pone a llover así que no hay mejor momento para ir a tomar un latte machiacto, que vendría a ser un café con leche extremadamente corto de café servido en un vaso alto (no de tubo). Esta realmente bueno el café, hacemos tiempo y vemos un poco más la guía a ver donde podemos dirigirnos y documentarnos un poco acerca de lo que hemos visto y veremos.
A la que cesa la lluvia nos dirigimos a otras de las grandes de Roma, el Templo di Adriano, el Pantheon y la Piazza Navona.

Del templo solo quedan las columnas, eso sí majestuosas como casi todo lo que hacía los romanos, aunque el deterioro de estas se nota más que de otros monumentos de la ciudad.
 Ya con las ganas de ir a ver el Pantheon nos dirigimos hacia él y cuál es mi desilusión cuando veo que la mitad derecha de la fachada se haya con andamios pequeño chasco que me llevo. Siempre me sucede lo mismo, siempre que me dirijo a ver monumentos, catedrales, puentes, etc., en cualquier ciudad siempre tiene que haber algo en obras, es mi cruz. Por suerte el interior se halla en perfecto estado. Es majestuoso por dentro.
El orificio situado arriba es un agujero literalmente, por lo tanto deja pasar el sol que se refleja en las paredes del interior, pero en consecuencia también entra la lluvia por él y por ello en el suelo hay unos orificios para evacuar el agua que entre dentro.

Durante el solsticio de verano el sol incide directamente en la puerta de entrada, era por ello que el emperador entraba por la puerta ese día, habiendo reunido a todo el pueblo dentro, para que al entrar pareciera un dios iluminado.

Tras la magnífica visión del Pantheon nos dirigimos hacia la Piazza Navona, el centro de Roma.

La Piazza Navona tiene forma de estadio, ya que antiguamente era uno y todavía a día de hoy conserva la forma, circular en uno de sus extremos y recto en el opuesto. Se pueden encontrar cantidad de pintores que están vendiendo sus cuadros al carboncillo, al óleo o al agua.

Su fuente, seca y en obras es el centro de dicha plaza, justo entre las fuentes de Bernini y Borromini.

Una vez que ya hemos comido y habiendo reposado un rato nos dirigimos a la Piazza Campo dei Fiori donde todos los días hay un magnifico mercado donde venden flores, pasta, y fruta y verdura fresca, carne y todo tipo de quesos, es volver atrás en el tiempo y ver un autentico mercado con todo su bullicio enclaustrado en una pequeña plaza presidida por la estatua de un monje que todo lo vigila.
Visitamos el mercado y nos dirigimos hacia una terraza para tomarnos un Capucchino y nos vamos a la zona donde se encuentra el Area Sacra y a posterior irnos al Monumento a Vitroiro Emanuele II, en cuyo interior se puede observar un pequeño museo de mediados del S. XIX y que además nos ofrece unas bonitas vistas de Roma.
Ya entrada la noche y habiendo cenado (Pasta Alla ‘Amatriciana, ya solo queda probar el Risotto) nos vamos a comer un gelatto al lado de la fontana di Trevi, que adquiere otro encanto bajo la luz de las estrellas y de la luna.




Domingo, 28 de marzo ‘10

Al llegar allí vemos que hay muchísima gente y nos damos cuenta que el papa esta oficiando una misa, nos quedamos un rato escuchando, que no entendiendo, y nos vamos. Ya podemos decir que hemos estado en una misa del Papa.
Decidimos ir a ver la basílica de San Pietro y el museo, pero hay casi 3 horas de cola y nos planteamos otra opción, así que nos dirigimos a ver el Castel Sant’ Angelo.
Este castillo además de castillo ha sido también fortaleza, mausoleo, prisión, refugio de papas e incluso palacio.
Dice la leyenda que una vez la peste asoló Roma y la gente fue a resguardarse de la enfermedad en el castillo, una vez hubo pasado la peste se dice que el Arcángel Gabriel bajo del cielo y posándose en una de las torres envainó la espada en señal de que la peste había terminado y que el pueblo podía volver a la vida normal.
Visitamos todo el castillo por dentro y vemos alguna que otra reliquia y lo laberíntico que es todo, así que después de andar un buen rato y viendo que la misa que se estaba oficiando ya ha terminado nos acercamos a la Piazza San Pietro y poder disfrutar un poco mejor del Vaticano sin tanto bullicio.
Sabemos que la misa ha terminado puesto que desde el castillo hay visión directa al vaticano, se dice que existe un pasadizo secreto que podía llevar a los papas directamente del vaticano hacia el Castillo en caso de emergencia sin que fueran vistos.
Nos da la hora de comer y yo hoy me había planteado comerme un típico pannini y así ha sido, ya con el estomago lleno y tras pasar por una hamburguesería para coger una hamburguesa y unas patatitas con su refresco nos vamos a la Piazza Della Republica muy cerca de donde tenemos el hotel, descansamos un rato en la fuente y vemos que hay una pequeña basílica la de Santa Maria de li Augeli, donde por fuera parece destruida y como ya he comentado pequeña y al entrar engaña, es mucho mas grande y su estado de conservación es perfecta y esta muy bien cuidada.
Ya es tarde así que nos volvemos al hotel para ducharnos y salir a cenar y hasta mañana que será otro día.