21 septiembre, 2008

Sierra de Guara, Barranco Formiga+Gorgonchón

Jueves, 18 de septiembre de 2008

Hoy contaré la historia del Trekker pero que esta vez no sube a las alturas al contrario, baja a las profundidades.
Como toda aventura, empieza bien entrada la mañana. Nos levantamos a las 7.45, un buen desayuno y preparar los bocadillos para el extenuante día que nos espera. Tras los pocos preparativos nos disponemos a ir a recoger al tercer componente de dicho descenso. Con todo esto son ya las 8.30 de la mañana pasadas, así que nos dirigimos al centro donde nos espera el guía.
Un par de horas más tarde llegamos al rio Formiga para disponernos a hacer nuestro primer barranco del día. Pero antes de eso nos toca la aproximación. Andamos unos 45 minutos a través de un bosque con el neopreno a cuestas como si fuera un muerto. Pasamos por una antigua cueva, que según nos cuenta el guía se usaba antaño para que los pastores pasaran la noche y de ello queda constancia ya que el techo esta todo ennegrecido a causa del humo de las fogatas que allí se debían hacer, ya sea para calentarse o para cocinar.
Un sorbito de agua y empezamos a descender hacia el barranco, pasamos primero por una especie de Via Ferrata atados a un cable para evitar posibles resbalones y caídas.
Llegamos al punto de entrada al barranco descendemos nuestro primer rappel y llegamos al lugar donde nos pondremos los neoprenos e iniciaremos el descenso.
Empezamos a andar y al poco nos encontramos con nuestro primer rappel dentro del mismo Barranco, es un rappel sencillo sin mayores dificultades.Proseguimos con nuestro descenso y nos topamos con un agujero. Hay que meterse por un pequeño agujero de poco más de 50 centímetros de diámetro en el cual después de esto tienes un mini tobogán que va a dar a una pequeña poza.
Llega nuestro primer salto entre paredes verticales. Saltamos unos 5 metros aproximadamente, un salto bonito en el cual nos empieza a despertar la adrenalina. Tras este salto empezamos a salir un poco de las apretadas paredes.
Salimos de estas y proseguimos el descenso, algún que otro salto más, pozas bonitas, pequeños trozos en los que intentamos pasar opositando pero el cual acabamos en el agua, bonitos paisajes, fauna de la más diversa, etc.
Llegamos a un sitio nombrado (desconozco si solo por nuestro guía o por los demás conocedores de este descenso) “El Chocho de la Lola” es otro pequeño agujero en el cual nos hemos de meter y al igual que el anterior este nos lleva a un pequeño tobogán. Bajamos por este y una vez llegamos al agua otra vez miramos hacia arriba y vemos él porque del nombre de dicho sitio.
Continuamos ya el poco camino que nos queda y llegamos al final del barranco. Han sido 3 horas bonitas culminadas al final de este por un bonito salto de unos 3 metros, en el cual nos lanzamos unas cuantas veces para acabar de abrir apetito y comer los bocadillos.
Tras la comida, la quita de neoprenos, nos dan las 3 de la tarde pasadas. Hacemos el viaje de vuelta a los vehículos para irnos hacia el siguiente barranco del día, Gorgonchón.

Gorgonchón, menudo barranco. 200 metros de un barranco que personalmente acojonan y desde aquí felicito a la gente que lo hizo antes que yo y que lo hará después de mí porque realmente es un barranco técnico. Una vez llegamos ahí entiendo porqué el guía nos explica que tenemos aprender a opositar. La foto esta que os pongo aquí abajo, la postura que tengo adoptada se le llama opositar.
Hacemos el primer trozo en el cual hay que opositar, parece sencillo y no genera más problemas, el problema vendrá luego.
Llegamos a un sitio, en el cual hay colgado en un tramo de 5 metros, una cadena y un par de cuerdas. Tienes que avanzar estos 5 metros opositando. Es un tramo que personalmente consideré muy exigente y complicado. Sufres, te resbalas, a no ser que lleves un calzado apto para esta práctica, ves que las fuerzas te flaquean y empieza una sensación de agobio, claustrofobia, impotencia que hace que te desanimes un poco, pero que una vez conseguido te da una sensación de superación muy grande.
Debajo tienes el rio pero no puedes rappelar directamente ya que el tramo este consiste como de dos cascadas. En la primera se forma como un remolino en el cual corres riesgo de muerte, así que no queda otra que ir por el pasamanos este, avanzar los 5 metros en horizontal y luego descender, pero aquí no acaba, abajo tienes un paso estrecho en el nivel del agua de no mas 15-20 cm en el cual si intentas pasar por ahí te quedas encallado con todo el equipo, por lo tanto no te queda otra que volver a opositar con los brazos para subirte entre ambas paredes para poder sortear este estrecho paso. Una vez hecho este tramo el resto del barranco no presenta más dificultad, simplemente proseguir a través de un precioso paisaje, una luz espectacularmente bella y unas vistas hermosas.
Llegas al final al último sitio donde por fin ves la luz del sol en el cual te espera una pequeña y bonita cascada antes justo de ir hacia los coches y pensar en el día…

01 septiembre, 2008

Collserola en BTT

Sábado, 30 de agosto de 2008

Me levanto con prisas, como siempre, cansado pero con ganas de hacer mi primera salida BTT aunque no sea muy lejos ni muy dura, pero la primera es la primera. Tras tener que ir a comprar alguna cosilla de última hora nos equipamos y nos vamos dirección Montbau. Cogemos el metro y la gente nos mira como raros, dos tipejos con mallas, dos BTT, mochilas, cascos, etc., no creo que sea una imagen muy normal dentro de un vagón de metro (aunque cosas peores se han visto).
Llegamos a nuestro destino sin mayores problemas, aquí es donde nos surgirá el primero. Salimos de la estación de metro y… ¿Qué dirección hemos de coger? En el itinerario no te dice nada así que probamos a ir dirección Llobregat (para quien no lo sepa dirección Llobregat es dirección hacia el sur de España) tras un breve pedaleo no nos gusta el sitio por el que estamos pasando, así que yo comento
-Creo que nos hemos equivocado.
-Es posible, damos la vuelta y vamos en la otra dirección.

Tras recorrer un trozo más en la dirección opuesta vemos que por ahí tampoco tiene muy buena pinta, así que decidimos preguntar a uno de los muchos ciclistas que nos pasaban y por fin obtenemos la dirección correcta. Ya se sabe, la primera intención y la primera intuición es la buena.

Por fin conseguimos llegar a la Carretera de la Arrabassada, aunque ese no era nuestro planteamiento ideal pero como el ciclista amable nos dice que por ahí también podemos llegar pues le hacemos caso. Llegamos al Principio de la Carretera de las Aguas. Nos ha costado llegar hasta allí. La subida que hay no es precisamente una subida fácil, opto por ir sentado ya que ataco mejor las subidas así. Casi se me levanta la bici en un par de ocasiones mientras subía, tras el primer susto en el que casi me voy atrás decido ponerme de pie, pero de pie me patina la rueda trasera así que vuelvo a la posición inicial y conseguimos llegar arriba.

Una vez en la Carretera de las Aguas un camino bonito sin asfalto como a ambos nos gusta, una pista de tierra bien conservada, con tranquilidad y disfrutando de unas vistas de Barcelona curiosas y bonitas.
Llegamos al otro extremo de la Carretera de las Aguas, volvemos a mirar el mapa y no sabíamos hacia dónde ir, así que decidimos subir por el sendero que nos lleva hasta la ermita de Sant Pere Martir.
Para quien no lo sepa la ermita se encuentra situada donde ahora está la antena de repetición de la señal de Televisión. Una vez arriba decidimos bajar por el otro lado de la montaña, así que decidimos meternos en una pista que según indicaciones es ciclable. ¡Error! Es una mal camino lleno de piedras enormes en medio, estrecho y con un desnivel muy pero que muy considerable.
Al principio los dos creemos que podemos descender por ella, otro error, casi nos matamos los dos un par de veces. Reconozco que me hubiera gustado bajar por ella, pero el riesgo era demasiado, y nuestra experiencia sobre este tipo de terreno, muy baja. Así que decidimos bajarnos de las bicis y bajarlas andando. En el transcurso del camino nos adelanta un hombre que estaba bajando el sendero ese montado en ella, digno de admiración por mi parte y creo que por parte de mi compañero también.
Llegamos otra vez a la Carretera de las Aguas proseguimos unos metros y cogemos el primer camino que se aleja de la Carretera de las Aguas, bajamos por una carretera bonita con curvas que nos devuelve otra vez a la civilización.